Cómo Saber si se Trata de Tu Intuición o un Exceso de Pensamiento

por Martijn
Cómo saber si se trata de tu intuición o de un exceso de pensamiento

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¿Estoy pensando demasiado o es mi intuición? Esta es una pregunta muy común que se hacen muchas personas. Y es muy comprensible, porque nuestra mente suele bloquearnos para experimentar nuestra intuición con claridad.

¿Cómo saber si se trata de tu intuición o de un exceso de pensamiento?

Todos hemos tenido esos momentos de duda. ¿Es mi intuición? ¿O me lo he inventado yo mismo? Y a veces es difícil distinguir las dos cosas. Pero, en realidad, es muy sencillo saber cuándo te habla tu intuición.

El pensamiento nunca puede ser intuición. Porque la intuición es instantánea, no está controlada ni guiada conscientemente por ti. Mientras que el pensamiento siempre es controlado por ti.

A veces puede parecerte que son muy similares porque crees que no controlas tus pensamientos. Y esto puede darte la impresión de que la intuición y el pensamiento excesivo son muy difíciles de distinguir. 

¿Cómo puedo distinguir entre la intuición y el exceso de pensamiento?

Aunque al principio la intuición y el pensamiento excesivo puedan parecerte muy similares, en realidad son completamente diferentes.

Aquí tienes algunas características de la intuición:

  • Es instantáneo
  • Produce una sensación inmediata
  • Se sabe algo inmediatamente
  • No hay ninguna duda

Puedes ver claramente las diferencias con el exceso de pensamiento:

  • Es reactivo (no instantáneo)
  • Aparece después de la primera sensación
  • Produce un estado de incertidumbre perpetua
  • Dudas sobre lo que crees que es correcto

Entonces, aquí puedes ver claramente que el pensamiento excesivo ocurre después de la intuición. Pero como viene inmediatamente después de esa primera corazonada de la intuición, es muy fácil confundirlas. Y como ambos pueden ocurrir en tu mente en una fracción de segundos, puede ser muy difícil distinguir uno del otro.

Para poder reconocer tu intuición tienes que aprender a separarlas. Hacer esto es más fácil de decir que de hacer.

La causa del exceso de pensamiento es tu juicio (inconsciente) sobre tu intuición. Por tanto, la clave para sintonizar con tu intuición es aprender a interrumpir tu juicio. Esto dará lugar a un retraso de tus pensamientos (el exceso de pensamientos) y, en consecuencia, a una clara separación entre el momento de la intuición y el inicio de tus pensamientos sobre la intuición que acabas de percibir en tu interior.

¿Cuál es la diferencia entre el puro instinto y las inseguridades y el exceso de pensamiento?

Tu intuición, tu instinto interno, se basa en un conocimiento interior que está conectado a la conciencia universal desde donde puedes aprovechar el conocimiento que de otra manera no deberías tener con las experiencias que has tenido en tu vida.

Las inseguridades y los pensamientos excesivos se basan en las experiencias que has tenido en tu vida hasta ahora. Te impiden seguir tu intuición y te crean dudas y miedo.

Entonces, ¿cómo se siente la intuición?

No es fácil de explicar con palabras porque es más bien algo que se experimenta como una sensación. Y al final, es una experiencia personal que puede variar ligeramente para cada uno.

Sin embargo, la intuición suele sentirse como una especie de conocimiento más profundo. Llega con un momento de total certeza. Este momento puede ser muy breve, dependiendo de tu capacidad para mantener el impulso y evitar que fluyas hacia el juicio y los pensamientos.

Es casi como si algo o alguien te lo diera, directamente en tu consciencia. Como si hubieras descargado una nueva información en tu cerebro.

La intuición puede ocurrir y ocurrirá en cualquier momento y lugar, siempre que estés abierto a recibirla. Y, a menudo, te dará percepciones inesperadas y que no están en consonancia con lo que has aprendido y experimentado en la vida.

Cuanto más escuches y sigas tu intuición, más se alineará con tu experiencia.

Cómo saber si tienes una fuerte intuición

Es muy fácil saber para todos si tienes una fuerte intuición. La realidad es que todo el mundo tiene una fuerte intuición, siempre. Por lo tanto, no deberías preguntarte si tienes una fuerte intuición o no. Sería mejor que te preguntaras si tienes una fuerte capacidad de “escuchar” a tu intuición.

Y cuando digo “escuchar” no significa necesariamente que tengas que oír algo en tu mente o con tus oídos físicos. Escuchar tu intuición significa sintonizar con ella. Significa ser capaz de percibir tu intuición de cualquier manera que se te revele.

Cuanto más seas capaz de suspender tu juicio y ponerte en la brecha entre ese momento instantáneo de intuición y el primer pensamiento después de ese atisbo de inspiración, más estarás en sintonía con tu intuición.

Por lo tanto, sentirás que tu intuición se hace más fuerte cuando ganes control sobre tus pensamientos y aumentes tu capacidad de dejar de interactuar temporalmente con tus pensamientos.

Pero entiende que no es tu intuición la que se está fortaleciendo. Siempre ha estado ahí, tan fuerte y presente como siempre. Lo único que ha cambiado es que has aumentado tu capacidad de estar quieto y sin juzgar.

¿Qué significa que tu intuición sea fuerte?

Esto significa que cuando tu intuición es fuerte, en realidad, tu capacidad de permanecer sin juicio y de reconocer lo que tu intuición te dice es fuerte.

Y una vez que hayas adquirido esa capacidad serás capaz de fluir más con la vida. Vivir en el momento y ser plenamente capaz de adaptarte a cualquier forma en que la vida te ocurra.

Esto significa que tendrás más posibilidades de ser feliz. Porque cuando sepas adaptarte a la vida, no te quedarás anclado en el pasado y estarás menos apegado a las cosas que te gustan y disfrutas.

Y el no apego es una de las grandes virtudes que uno puede tener en la vida. Es una habilidad que mucha gente dice dominar, pero que en realidad muy pocos dominan. Es una habilidad que puede ser aprendida por todo el mundo, pero muy pocos quieren realmente que se les enseñe.

Porque dominar el no apego significa que tendrás que enfrentarte a tus miedos de perder todo lo que amas. La familia, los amigos, las mascotas, las aficiones, las posesiones materiales, todo. Y eso es algo que la mayoría no está dispuesta a hacer.

Sin embargo, el desapego es a menudo malinterpretado porque lo único que realmente vas a perder es el miedo que te impide disfrutar de verdad de esos momentos con las personas y las cosas que más quieres.

¿Cómo puedo fortalecer mi intuición?

A estas alturas ya debes tener una idea bastante clara de cómo puedes fortalecer tu intuición. Es obvio que no lo haces trabajando en tu intuición. Porque ahora sabemos que siempre está ahí, lista para que recibas su mensaje.

Tu intuición se hará más fuerte cuando tengas menos juicios de valor. Y el truco está en aprender a reconocer ese espacio de la nada entre lo que se te da a través de la inspiración y la intuición, y tus propios pensamientos controlados.

La meditación es una gran práctica que puede fortalecer tus habilidades. Pero ten siempre presente que el objetivo de la meditación no debe ser lograr algo o conseguir algo. Tu objetivo durante la meditación debe ser observar la brecha, el vacío de tiempo y espacio, que puede servir como una apertura en tu consciencia para que tu ser superior te hable a través de la intuición.

¿Es tu intuición siempre correcta?

Y cuando domines esta habilidad llegarás a ver que, cada vez que consigas estar completamente en sintonía con tu intuición, ésta nunca fallará. Siempre tiene razón.

Siempre que parece que tu intuición está equivocada, lo único que ha ocurrido es que la has interpretado mal.

Por lo tanto, aquí la clave es de nuevo no centrarse en dominar la intuición. Tu objetivo debe ser eliminar todas las barreras que te impiden ser capaz de escuchar y sentir tu intuición correctamente.

Eso es todo. Parece muy fácil, pero requiere mucha práctica. Muchas horas, muchos fracasos. Cuanto más practiques, más silencio ganarás en tu interior. Te volverás más pacífico y sereno.

Vivirás más conectado y en sintonía con lo que realmente eres. Y un día no tendrás que preguntarte si estás pensando demasiado o si fue tu intuición. Porque la intuición se ha convertido en tu segunda naturaleza. Y pensar demasiado es algo que pertenece al pasado.

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