Cómo Vencer al Narcisista

¿Sientes que siempre eres tú el perjudicado? ¿Siempre te culpan a ti? ¿Incluso cuando intentas hacer lo correcto? Si es así, puede que tengas una mentalidad de víctima. Pero no es culpa tuya.

Bueno, más o menos…

Los narcisistas son maestros en hacerte sentir como la víctima. Son expertos en jugar con tus debilidades e inseguridades. Pero no es imposible liberarse de sus garras.

En este artículo te enseñaré cómo pasar de una mentalidad de víctima a una mentalidad proactiva cuando trates con un narcisista. Te enseñaré cómo establecer límites, protegerte y recuperar tu poder.

Así que, si tienes un narcisista en tu vida, y seamos honestos, todo el mundo lo ha tenido en algún momento, querrás quedarte para finalmente entender cómo dejar de atraer el mismo tipo de personas a tu vida una y otra vez, sentirte empoderado y atraer un tipo de personas diferente que tengan una influencia positiva en ti y en tu vida.

La Trampa de la Víctima

Es muy interesante ver la dinámica en todo el mundo cuando se trata de narcisismo. Vivimos en un mundo narcisista en el que el narcisismo es a menudo recompensado. Lo ves todos los días, en las redes sociales, en los deportes, en la política, en los negocios, en todas partes.

Y luego, cuando la gente habla de narcisistas, el 99% de las veces se discuten y explican los rasgos de un narcisista. Y siempre son las “víctimas” del narcisista las que hablan de ello. Victimizándose sin hacerse cargo de cómo se sienten y perciben su situación.

Es alucinante cómo todo el mundo habla del daño que hacen los narcisistas a los demás y a sí mismos, cómo lo hacen y cómo reconocer si tienes a alguien así en tu vida. Pero nadie habla de cómo solucionarlo, cuando eso es lo más importante.

La cuestión es que a las víctimas les gusta ser víctimas. Escuchar que, en realidad, sus sentimientos, emociones y percepción de la vida son su propia responsabilidad y que el narcisista no tiene la culpa de nada en absoluto no es lo que quieren oír. Porque ser una víctima es fácil. Tú no tienes la culpa de cómo te sientes, es él o ella.

Asumir toda la responsabilidad de cómo te sientes es difícil, te saca de tu zona de confort y saber que no eres responsable de las acciones o palabras de otra persona, sino que eres 100% responsable de cómo percibes esas acciones y palabras y cómo te impactan mental y emocionalmente es algo que no mucha gente está dispuesta a hacer. Es más fácil seguir siendo la víctima, aunque eso te haga sentir mal. Porque así al menos no es culpa tuya.

El Arma Secreta del Narcisista

Y ésta es el arma secreta del narcisista. Tu miedo y tu falta de voluntad para asumir toda la responsabilidad de cómo percibes el mundo que te rodea.

Tus inseguridades y tu falta de autoestima y, seamos sinceros, también tu pereza.

Se necesita un duro trabajo interior para romper esta barrera. Una barrera en la que, por un lado, parece que la vida te sucede a ti. Donde las experiencias externas de tu vida determinan lo que sientes, piensas y crees. Y de esa manera determina la calidad de tu vida. El otro lado de esta barrera mental es donde sabes que lo que sientes, piensas y crees son decisiones conscientes tomadas por ti mismo, pero sólo cuando tú decides que lo son. Es una decisión que tomas tú, una y otra vez.

Por lo tanto, no importa si tienes un narcisista en tu vida. Puede tener todos los rasgos, mostrar un comportamiento de superioridad, presumir de cualquier cosa, atraer toda la atención hacia él, tener falta de empatía, ser arrogante y manipulador, y tener una habilidad única para, de alguna manera, ser siempre capaz de darle la vuelta a la tortilla para que otro quede mal o cargue con la culpa.

Nada de eso importa. Siempre y cuando asumas la plena propiedad y responsabilidad de tu experiencia.

El Poder de Elegir

Es una elección consciente que tienes que hacer cada día, cada momento, cada pensamiento. Hasta que se convierta en un hábito. El poder de un narcisista sólo es real si tú lo crees y lo permites.

Pero en el momento en que asumes la plena responsabilidad de tu percepción y experiencia, ese poder desaparece. El narcisista no encontrará las respuestas y reacciones con las que se siente cómodo y modificará su comportamiento o simplemente abandonará tu vida en busca de un entorno mejor en el que su comportamiento manipulador pueda echar raíces.

Por lo tanto, si quieres liberarte de las garras de un narcisista, tienes que dejar de participar en el juego de las culpas. Porque, en cierto modo, estás haciendo exactamente lo mismo que el narcisista. Él te culpa a ti y tú le culpas a él de cómo te sientes. Ambos actúan y se comportan como víctimas.

Por supuesto, esa es una receta para el desastre.

3 Pasos para Liberarte

Sólo hay una persona que puede cambiar tu situación: tú.

Sé que da miedo, pero te prometo que si das los siguientes tres pasos verás una mejora drástica en tu vida muy rápidamente.

• Asume una responsabilidad radical. Sepa y comprenda que tú y sólo tú eres responsable de cómo te sientes y de cómo percibes las circunstancias externas. Observa tu mundo exterior y no reacciones ante él. Vive una vida proactiva y crea los pensamientos, creencias y sentimientos primero.
• Priorízate a ti mismo. No hay nada más importante en tu vida que tú mismo. Si algo no te hace sentir bien, aléjate. Confía en tu intuición y ten claro que si tú no te das prioridad, nadie lo hará. Y sólo puedes ser realmente valioso para los demás si te valoras a ti mismo en primer lugar.
• Mantén una vibración alta. No caigas en la trampa de sentir vergüenza, culpa o miedo. Todos estos son estados emocionales de baja frecuencia que son fácilmente reconocibles por cualquiera a tu alrededor. Especialmente por un narcisista.

En lugar de eso, intenta sentir aceptación, amor, alegría y paz tanto como puedas, dirigiendo deliberadamente tus pensamientos, creencias y sentimientos en la dirección en la que deseas que vaya tu vida. Más pronto que tarde, tu entorno externo tiene que adaptarse para resonar con tu experiencia interior.

Sé que muchos de vosotros queréis saber si debéis romper todo contacto con un narcisista. Pero yo no soy la persona que puede decirte qué hacer. Cada situación es diferente.

Lo que sí puedo decirte es que, cuando pongas en práctica estos tres pasos de forma coherente, notarás que tu autoconsciencia y tu autoestima aumentan significativamente. Estarás mucho más en sintonía con tu intuición y sabrás claramente cuál es la mejor decisión para tu situación desde dentro hacia fuera.

El Camino de la Sanación

La sanación del abuso narcisista comienza con el reconocimiento de que fuiste tú quien permitió que el abuso sucediera. Y sólo tú puedes liberarte de la mentalidad de víctima en la que te has forzado todo este tiempo.

Comprende que sólo puedes ser atacado si en el fondo sientes que hay algo que defender o justificar, sólo puedes ser ofendido si tienes falta de confianza y autoestima, y sólo puedes ser culpado si te sientes culpable. De lo contrario, el ataque o la ofensa no tendrán ningún poder sobre ti, serán completamente irrelevantes.

Así que, a partir de ahora, cada vez que sientas la necesidad de defenderte, de justificarte o explicarte, o te sientas culpable o avergonzado, en lugar de mirar fuera, a la persona que te ha hecho sentir así, mira dentro de ti y comprende que la verdadera razón por la que te sientes así nunca puede estar fuera de ti.

Por supuesto, eso no significa que no puedas hacer cambios externos. Si no te parece bien seguir en esa relación, déjala. Si sientes que necesitas un cambio de ambiente y entorno, múdate.

Pero ten siempre presente que, mientras los cambios externos no estén respaldados por un cambio de pensamientos y creencias en tu interior, seguirás encontrándote con el mismo tipo de problemas una y otra vez.

El Nuevo Tú

Te garantizo que si haces estos cambios en tu vida no te reconocerás dentro de unos meses. Pero tienes que ser constante. Un cambio sólo es un cambio real si se convierte en un hábito.

Al principio, sentirás que tus reacciones automáticas vuelven por defecto a tu antigua percepción de la vida. Esto significa que tienes que estar atento y observarte a ti mismo, a tus pensamientos y a tus creencias, todo el tiempo. Hazlo con constancia y se convertirá en un hábito.

Un hábito que te hará ver y comprender que no puedes protegerte del abuso narcisista sin desarrollo interior. No te proteges de un narcisista, sino que les superas. Cambias tu vibración y te colocas en una nueva frecuencia.

La frecuencia del nuevo tú. Un tú consciente de sí mismo, lleno de vida, confianza, autoestima, alegría y paz interior.